Gravespadà

COMPLEJO GRAVESPÀ

Cuando se piensa en crear una nueva empresa, no puede hacerse sin tener en cuenta la actual situación económica y sus consecuencias para la sociedad. Haciendo un pequeño análisis de los diferentes sectores en que la crisis ha afectado en menor medida puede ser el sector del ocio; conciertos, viajes o videoconsolas. La sociedad ha intentado adaptarse a la situación económica pero no ha llegado a renunciar completamente a disfrutar de su tiempo libre.

Por tanto, parece lógico, que una nueva empresa tendría más probabilidades de salir adelante, respecto a otras que se dedican a sectores de la construcción o la maquinaria.

Idea

De esta lógica nace Gravespadá. Como se puede observar este nombre nace de la unión de las palabras gravedad y Sierra D’Espadà, las dos cosas más importantes que necesita nuestro negocio para funcionar.

Nuestro negocio seria un complejo al aire libre, ideal para toda la familia y totalmente en contacto con la naturaleza con una gran dosis de adrenalina. Situado a las faldas del Peñagolosa, se asegura el contacto directo con la naturaleza.

La idea consiste en lo siguiente; se asfaltaría un tramo, muy sinuoso de no más de dos metros de ancho con un desnivel importante. Tan solo haciendo uso de la fuerza de la gravedad, los participantes se lanzarían en un pequeño triciclo sin pedales y modificada para tal fin. Al ser la totalidad del tramo en pendiente, no se necesita ninguna clase de tracción y únicamente aprovecha la fuerza de la gravedad. Esta idea está basada en el principio por el que un trineo desciende una ladera y que tanto hace disfrutar a sus ocupantes.

Al rededor de esta idea, podrían construirse diversos negocios de repostería o souvenirs contribuyendo así con la economía de la provincia.

Economía

Cierto es, que parece este negocio la inversión inicial en muy alta, la adecuación del suelo, el asfaltado y la construcción de un sistema que suba y baje a los clientes serian los principales gastos a los que tendría que enfrentarse el proyecto, aunque todo esto lo contrarrestaría con el bajo nivel de mantenimiento que necesita.

Las personas interesadas, accederían al recinto pagando una pequeña cantidad por persona, y podrían disfrutar de las instalaciones todas las horas de luz natural.

Como se busca que las familias y amigos pasen un día agradable, que se repita a menudo, los precios de los restaurantes y demás no serian más elevados que en cualquier otro.

Además, al tratarse de una idea novedosa, se espera que personas de las comunidades autónomas limítrofes acudan a nuestras instalaciones.